lunes, 7 de febrero de 2011

Viaje al centro de la tierra

"En el fondo es bueno", "Pero en el fondo ¿qué pensás?", "No quería que venga, pero en el fondo, sí quería". Los ejemplos pueden seguir, ya los conocemos todos.

Lo llamativo de esto es que el fondo se puede cambiar por en verdad.

En el fondo es lo que verdaderamente queremos.

Pero lo que no se si es tan explícito es ¿a donde es que queda el fondo? Si tiro una piedra ¿cuánto tarda en escucharse que tocó fondo?

La gran pregunta: ¿Hay Fondo?

No, no hay fondo. Podemos perdernos buscándolo en el vasto vacío que nos llena. Que feo que suena eso, voy de nuevo. Podemos perdernos en la inmensidad de nuestro ser, ya sea que vayamos hacia abajo, buscando “el fondo” o en cualquier otra dirección.

No hay límite, siempre podemos conocernos un poco más, sernos un poco más sinceros, ser lo que “en el fondo queremos”.

Lo que hay “en el fondo” es cada uno (sin que sea muy claro que es ese uno del cada uno). Lo que de verdad sentimos.

Lo que pasa es que a veces, por razones propias, o peor aún (peor?) por razones externas, las cosas más nuestras, las que más quieren salir a los gritos al mundo, son las que guardamos en ese fondo.

Hay que hacer como se hace con las medias, darlas vueltas. Que el fondo sea lo que nos envuelva y no lo que está adentro atrapado.

3 comentarios:

  1. Lo de dar vuelta las medias, cuando se trata del ser, tomaría años de dedicación. Aquí la inmediatez es un espejismo. Estoy de acuerdo en que no hay fondo. A veces se percibe como abismo, otras como fuente.......muy bueno el post

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  2. Muy bueno!!!!
    Esto es como "hay que tocar fondo para darte cuenta de las cosas", pero quién marca ese fondo???
    Para mí, el único fondo es la muerte, suena trágico, pero siempre se puede caer más bajo, tener más problemas y cagarla más con la gente...

    Besos y que este blog no tenga fondo ;-)

    Galleguita (ya me explicarás como te dejo un mensaje desde "mi perfil" jeje)

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  3. No coincido en que hay que poner el fondo en la superficie. Es un horizonte al que, sabiendo que nunca vamos a llegar (como a cualquier otro horizonte), tratar de acercarse nos da la unica posibilidad de hacer alguna modificacion duradera, consciente, elegida. Ahí dejo en el tintero todo otro debate sobre si se puede de hecho cambiar o no, pero volviendo... Claramente no se puede elegir cambiar si no conoces qué cambiar, si no te conoces. Buscar conocer ese fondo da un miedo de la gran 7 y cuanto mas oscuro parezca tanto mas posibilidad de hacerlo brillar. Pero traer ese fondo a la luz, no frente a uno mismo sino a los demas, pienso que es algo que esos demas tienen que ganarse...desnudarse no de cuerpo sino de alma, eso tiene que estar bien merecido...

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